domingo, 18 de febrero de 2018

#UnAñoDeAutoras con María Sánchez








1) Para aquellas personas que todavía no te conozcan, ¿quién es María? ¿Cómo te definirías?

Pues definirme es algo que no me gusta mucho, creo que le pasa a mucha gente. Es difícil encerrarte en palabras, es como ponerte límites. A la pregunta quién eres, solemos contestar con nuestro nombre, con nuestro trabajo, a lo que dedicamos nuestros días, qué nos gusta hacer en nuestros ratos libres, a qué aspiramos y con quién nos gusta pasar nuestro tiempo.
Yo soy veterinaria de campo, trabajo con cabras y cuando ellas me dejan, escribo. Soy defensora de la ganadería extensiva y de nuestro medio rural. Cultura y medio rural, feminismo y literatura, podría ser un buen comienzo para empezar a hablar de mí.


2) Háblanos un poco de Cuaderno de Campo (La Bella Varsovia). ¿Cómo estás llevando esa gran acogida por el público?

Cuaderno de campo es una carrera de fondo que empecé hace más de siete años. Quería despedirme de mis abuelos, contar mi día a día en el campo, trazar una genealogía de los hombres que me preceden, presentarme a mí misma como mujer, veterinaria y escritora. Reivindicar a los hombres y mujeres de mi familia que han hecho que me convierta en la mujer que soy hoy sin dejar de reivindicarme a mí misma. Es increíble la acogida que sigue teniendo el libro casi un año después de su publicación. Sinceramente, no tengo palabras.

3) ¿Qué es para ti el feminismo?

Soy feminista desde que me di cuenta que me movía y que trabajaba en un mundo de hombres. Creo que tiene un peso fuerte en ambas vertientes. Nosotras necesitamos contar nuestra historia, que nuestra voz se oiga, que no se nos ignore, ni se nos aparte a un lado por ser mujer.
Sin el feminismo no vamos a ningún lado. No quiero un mundo no feminista para mis hijas, ni para las generaciones que vienen. Quiero que las niñas del futuro nunca piensen que no pueden hacer algo por ser mujer, ni que se sientan inferiores por ello, ni que las manden callar, ni que cobren menos que un hombre. Quiero que puedan tener el mismo acceso que ellos en el trabajo. Que no tengan que recuperar la historia y la voz de tantas mujeres que fueron apartadas a la sombra e ignoradas por ser mujer. Y, por supuesto, deseo con todas mis fuerzas que no mueran más mujeres por el simple hecho de serlo. Por eso es maravilloso ver a tantas mujeres haciendo tanto por el feminismo, pero es una lucha de todos, una lucha totalmente necesaria y que tenemos con todas las mujeres, sean de donde sea, sin importar la edad, ni la raza, ni la clase social.

4) ¿Piensas que en la poesía hay igualdad entre hombres y mujeres en la actualidad?

Cuando en 2018 siguen apareciendo titulares como este: Los hombres ganaron el 82% de los premios públicos de poesía en España entre 1923 y 2016, creo que hay poco que añadir. En los años que vivimos,  una escritora como Nieves Álvarez junto a la Asociación Genialogías, ha tenido que publicar un libro para denunciar esto. Según Álvarez “ser mujer en España es sinónimo de tener menos posibilidades de obtener un premio de poesía o de ser miembro de un jurado. El poder está en manos de los poetas varones. Los resultados del estudio son demoledores, no solo porque a lo largo de casi 100 años analizados las poetas hayamos sido marginadas, excluidas y vilipendiadas, sino porque las instituciones públicas no cumplen la Ley de Igualdad Efectiva que les obliga a proponer jurados paritarios”.

¿Cambiará esto en el futuro? Más nos vale.

El enlace al artículo: https://www.playgroundmag.net/lit/premios-machistas-poesa_25031936.html

5) ¿Qué opinas de la necesidad de iniciativas como #unañodeautoras?

Fundamental y necesaria. Parece tan obvio, pero cuando escarbas un poquito más, y te decides a leer autoras, se abre un mundo de mujeres maravilloso que tenemos que sacar a la luz. Y eso también se hace leyéndolas, comprando sus libros, apoyándolas, compartiendo sus lecturas…

6) Tu vínculo con la poesía portuguesa es muy interesante. ¿Qué autora poco conocida nos recomendarías?

Sí, vivir en Lisboa y trabajar de vez en cuando por el país hermano me abrió una ventana que sigue abierta y de la que no me quiero separar. Mi favorita es Maria Gabriela Llansol. Recomiendo muchísimo a Filipa Leal, Sophia de Mello, Fiama Hasse, Adília Lopes, Golgona Anghel, Patrícia Lino, Tatiana Faia, Matilde Campilho…

7) ¿Qué opinas de la educación literaria española? ¿Crees que el hecho de que no aparezca ninguna mujer en los libros de texto, por ejemplo, en la Generación del 27, es por cuestiones de calidad poética?

Vuelvo al artículo que cité antes y copio aquí las palabras de Luna Miguel:
“Porque demuestra que durante el último siglo nuestra cultura y nuestras instituciones públicas han perjudicado la creación hecha por mujeres. Que en el momento de salir un libro al mercado o de presentarse a una competición, la discriminación al producto firmado por ellas es notable. Y también que el reconocimiento y las posibilidades de generar influencia, salir en prensa, ganar otros premios o figurar en los libros de texto de nuestras escritoras es mucho menor que la de nuestros escritores debido a la constante minusvaloración de las obras firmadas por mujeres.¿Nos ayudará “descubrir lo que ya sabíamos” a “destruir lo que ya temíamos”?Ojalá que sí”


8) ¿Qué poeta contemporánea nos recomendarías?

Muchas: María Martínez Bautista, Patricia Gonzalo de Jesús, Luna Miguel, Sara Torres, Alba Cid, Alana Portero, María Sotomayor, Luz Pichel, Ana Rossetti, Elena Medel, Pilar Adón…

9) Y para acabar, ¿cómo definirías “poesía”?

No me gusta poner lindes a la poesía, tampoco al poema.  El poema puede ser lo que le dé la gana. Un juego, una sensación, un experimento, una ecuación, un olor… y claro, también la mismísima vida, pero a la vez no tiene por qué serlo. Todo o nada a la vez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sígueme